
Cuando menos ganas tengo de que me estén terapeando a cerca cómo debería actuar, proceder, pensar, resolver, sentir, etc., es cuando la gente cercana y que me estima, más se hace presente, pero sólo para convertirse en mi "Pepe Grillo".
Agradezco infinitamente su preocupación y sus buenos consejos, pues no se quedan en el aire, pero cuando me entra el encaprichamiento de no escuchar razones ajenas, me resulta incómodo tener que darles por su lado o bien enfrentar una larga plática que no llega a ningún lado y que solo crea un tipo de fricción existencial, innecesaria.
Hace unos días tuve una de esas conversaciones, en la cual el tema central era si me sentía feliz con la vida que tengo? ...... (se hizo el silencio) .....
La respuesta fue rebuscada, general y tonta. Pero... cómo es que se mide la felicidad? existe un termómetro para medirla? si la medida es limitada a un 100% (es decir, se es feliz o no se es feliz), creo que 9.9 de cada 10 personas diría que no lo son.
Nuestro entorno está rodeado de preocupaciones, estrés, ratos de depresión, alguna que otra frustración, etc. "La felicidad completa no existe", sin embargo cuando hay oportunidad tengo la capacidad de poder evadir una que otra molesta situación a resolver, para no mermar mi felicidad diaria. Bastante tengo con los pendientes del diario como para dedicarme una hora o más a darle mil vueltas a cuestiones que no deseo resolver ahora.
Cuando mis preocupaciones comiencen a quitarme el sueño, será el momento de darles solución, mientras tanto seguiré siendo inmune a ellas.
Será apatía, conformismo, comodismo, indiferencia...no sé! sólo sé que hoy, no quiero enfrentar mis demonios internos.
Agradezco infinitamente su preocupación y sus buenos consejos, pues no se quedan en el aire, pero cuando me entra el encaprichamiento de no escuchar razones ajenas, me resulta incómodo tener que darles por su lado o bien enfrentar una larga plática que no llega a ningún lado y que solo crea un tipo de fricción existencial, innecesaria.
Hace unos días tuve una de esas conversaciones, en la cual el tema central era si me sentía feliz con la vida que tengo? ...... (se hizo el silencio) .....
La respuesta fue rebuscada, general y tonta. Pero... cómo es que se mide la felicidad? existe un termómetro para medirla? si la medida es limitada a un 100% (es decir, se es feliz o no se es feliz), creo que 9.9 de cada 10 personas diría que no lo son.
Nuestro entorno está rodeado de preocupaciones, estrés, ratos de depresión, alguna que otra frustración, etc. "La felicidad completa no existe", sin embargo cuando hay oportunidad tengo la capacidad de poder evadir una que otra molesta situación a resolver, para no mermar mi felicidad diaria. Bastante tengo con los pendientes del diario como para dedicarme una hora o más a darle mil vueltas a cuestiones que no deseo resolver ahora.
Cuando mis preocupaciones comiencen a quitarme el sueño, será el momento de darles solución, mientras tanto seguiré siendo inmune a ellas.
Será apatía, conformismo, comodismo, indiferencia...no sé! sólo sé que hoy, no quiero enfrentar mis demonios internos.